El discurso del rey

La historia del rey Jorge VI, su inesperada ascensión al trono del Imperio Británico en 1936 y el terapeuta del habla que ayudó al inseguro monarca a superar su tartamudeo. El príncipe Alberto de Gran Bretaña se ve obligado a tomar el trono como rey Jorge VI en un momento de gran agitación y cambio para el país. Sin embargo, su batalla personal con un severo impedimento del habla lo convierte en un líder inseguro en un tiempo que exige confianza y oratoria persuasiva. Es consciente de que su incapacidad para comunicarse fluida y efectivamente puede tener graves repercusiones para la nación que necesita su guía.

Su esposa, la duquesa Elizabeth, al reconocer la importancia de la habilidad de su esposo para conectar con el pueblo británico, decide buscar ayuda. Es así como contrata a Lionel Logue, un terapeuta del habla australiano con métodos poco convencionales y un enfoque sin pretensiones. La relación entre Alberto y Lionel comienza con cierta tensión; el príncipe siente desconfianza hacia alguien ajeno a la realeza y con un estilo poco ortodoxo. Sin embargo, conforme avanza el tiempo y las sesiones de terapia, la conexión entre ambos se profundiza.

Logue no solo actúa como terapeuta, sino que se convierte en un amigo y un aliado indispensable para Jorge VI. A través de ejercicios inusuales y una perspectiva fresca sobre el habla y la autoconfianza, Lionel empodera al rey para enfrentar sus temores. Con cada sesión, el progreso del rey se siente, y la intimidad que desarrollan pone de relieve temas de masculinidad, vulnerabilidad y la lucha interna de un líder en tiempos de crisis.

A lo largo de su viaje, Jorge VI enfrenta no solo su tartamudeo, sino también la monumental tarea de unir a su país en un período marcado por la inminente guerra y la incertidumbre. La conexión emocional entre él y Logue, forjada en medio de la presión y la adversidad, se convierte en un testimonio de la importancia de la amistad y el apoyo humano en los momentos más difíciles.

Este relato conmovedor, lleno de humor y resiliencia, invita a los espectadores a ser testigos del crecimiento personal de un hombre que, a través del esfuerzo y la valentía, logra superarse para servir a su nación. La película explora de manera magistral la dignidad y el sentido del deber en la vida de un rey, mostrando que incluso aquellos en posiciones de gran poder tienen sus propias batallas internas.