Policía, adjetivo

En la sombría y monótona Vaslui, Cristi es un joven policía, consciente de su deber, lacónico por naturaleza y recientemente casado con Anca, una maestra comprometida con su labor. La vida diaria de Cristi transcurre entre las rutinas del trabajo y los pequeños momentos de felicidad con su esposa, pero su vida da un giro inesperado cuando se le asigna la vigilancia de un adolescente que fuma marihuana y podría estar distribuyendo drogas entre sus amigos.

La misión es clara pero Cristi se siente incómodo con ella. Desde su perspectiva, el joven claramente no es un narcotraficante, y arrestarlo significaría arruinarle la vida. En su interior, Cristi no puede evitar pensar que en poco tiempo, Rumanía podría avanzar hacia una aceptación del uso recreativo de la marihuana, lo que hace que la situación sea aún más absurda para él. El choque entre su sentido de la justicia y los dictados de la ley se vuelve un dilema personal.

Mientras investiga, Cristi sigue al menor, observando sus movimientos en la ciudad mientras él fuma y se relaciona con sus amigos. A medida que la investigación avanza, se da cuenta de que la vida del chico no está exenta de dificultades; su padre es un obrero de la construcción, lo que añade una capa de complejidad a su situación. La empatía de Cristi hacia el joven crece, construyendo un conflicto interno: ¿Puede un policía tener una conciencia? ¿Es correcto cumplir ciegamente con las órdenes de sus superiores, incluso cuando va en contra de su moralidad?

La presión de su superior es constante, quien insiste en que «la ley es la ley», y le ordena cerrar el caso rápidamente con un arresto. Sin embargo, la integridad de Cristi le lleva a reflexionar sobre su papel en la sociedad y la verdadera naturaleza de la justicia. La historia se convierte en un examen crítico de la estructura de la ley y su impacto en la vida de las personas, cuestionando si los uniformes y las leyes realmente protegen a la comunidad o si, por el contrario, pueden convertirse en herramientas de opresión.

A medida que Cristi escribe sus informes y contempla reunirse con el fiscal, su batalla interna se intensifica. La cinta nos invita a reflexionar sobre los dilemas morales y las decisiones que enfrentan quienes están encargados de hacer cumplir la ley, entrelazando la narrativa con una atmósfera de tensión y humanidad que desafía las convenciones del cine policiaco tradicional.