¿Quién soy yo?

Un agente secreto pierde la memoria tras caer de un helicóptero en llamas. A partir de ese momento, se convierte en el objetivo de varios operativos de la agencia, pero él no tiene idea del motivo detrás de esta persecución. Jackie Chan, en el papel de un soldado de élite, aterriza de manera abrupta en la selva sudafricana después de que su misión para secuestrar a tres científicos, quienes estaban investigando un mineral muy poderoso, sale desastrosamente mal.

Despertando en una aldea de nativos locales, Chan se encuentra completamente confundido. Sin recuerdos ni identidad, los lugareños lo llaman «¿Quién Soy?». A medida que se adentra en esta nueva vida, se convierte en parte de la comunidad, enfrentando desafíos inesperados y superando pruebas que lo llevan a descubrir algo más acerca de sí mismo. Mientras lucha por recobrar su memoria, forma un vínculo especial con dos mujeres que se convierten en sus aliadas. Estas intrigantes personajes no solo lo ayudan a tratar de descubrir su identidad, sino que también aportan diferentes perspectivas sobre la vida y la lucha, enriqueciendo su viaje.

La historia toma un giro crucial cuando Chan, motivado por un deseo ardiente de respuestas, viaja hasta Róterdam. Allí, por pura casualidad, da con el paradero de la organización que secuestró a los tres científicos. Este descubrimiento no sólo reaviva su interés por su pasado, sino que también lo empuja a actuar de forma audaz para desmantelar la operación criminal que amenaza el bienestar del mundo. A medida que se enfrenta a sus enemigos, el poder del recuerdo y la identidad se convierten en temas central, explorando la conexión entre las experiencias vividas y el sentido del yo.

Su viaje no es solo una búsqueda por respuestas, sino también una lucha interna por recuperar la esencia de quien es. Con intensas secuencias de acción, humor característico y un fuerte mensaje sobre la redención y el sacrificio, la historia captura la esencia de un héroe que debe redescubrirse en medio del caos. Jackie Chan lleva a los espectadores a un viaje inolvidable que es tanto emocionante como emotivo, dejando claro que el camino hacia la identidad no es solo físico, sino también emocional y espiritual.