El triunfo de la fe

Der Sieg des Glaubens (título en inglés: The Victory of Faith, Victory of Faith, o Victory of the Faith) es un documental de propaganda dirigido por Leni Riefenstahl en 1933, y se considera su primera incursión en el cine propagandístico. Este filme se centra en la celebración del Quinto Rally del Partido Nazi, llevado a cabo en Nuremberg entre el 30 de agosto y el 3 de septiembre de 1933. A través de su elaborado montaje y su innovador uso de la cámara, Riefenstahl presenta una visión monumental del ascenso del nazismo en Alemania.

El filme destaca la figura de Adolf Hitler, retratado como un líder carismático y visionario, mientras que las intervenciones de Ernst Röhm, líder de las tropas de asalto SA, revelan la intimidad y cercanía que existía entre ambos antes de que ocurrieran los oscuros acontecimientos de la Noche de los Cuchillos Largos en julio de 1934, donde Röhm sería ejecutado por orden de Hitler. Riefenstahl captura la energía de la multitud, la pasión de los seguidores y la grandiosidad del evento, empleando técnicas innovadoras de cinematografía que impactaron la producción cinematográfica posterior.

Este documental no solo es significativo por su contenido, sino también por el contexto histórico que le rodea. La película se convierte en un testimonio visual del fervor y la ideología del régimen nazi durante sus primeros años. Cada escena está meticulosamente compuesta para resaltar la fuerza y la unidad del partido, al tiempo que se ocultan las tensiones internas que eventualmente llevarían a la traición y el derramamiento de sangre.

A medida que avanza la película, los espectadores son arrastrados hacia un mundo donde la lealtad ciega y la exaltación nacionalista son la norma. Las imágenes de desfiles masivos y discursos apasionados crean una atmósfera casi hipnótica, revelando cómo el cine puede ser utilizado como una herramienta de persuasión política. Riefenstahl no solo documenta eventos, sino que también forma la narrativa del poder y la ideología a través de su arte.

A pesar de su relevancia histórica, todas las copias del filme fueron destruidas por orden de Hitler, lo que lo convirtió en una obra considerada perdida hasta que apareció una copia en el Reino Unido en la década de 1990. La complejidad de su legado continúa siendo un tema de debate entre críticos y estudiosos, quienes analizan su papel en la propagación de la ideología nazi y su impacto en el mundo del cine. Der Sieg des Glaubens sigue siendo un ejemplo de cómo el arte puede ser utilizado para influir en la sociedad, evocando tanto admiración como repulsión.