Primer grado

El relato de un detective de policía se entrelaza con la vida de una bella viuda cuando ella es acusada de haber asesinado a su marido. Cuando Andrew Pyne, un importante empresario, es encontrado muerto de un disparo en un callejón de Nueva York, uno de los mejores detectives de la NYPD, Rick Mallory, comienza a investigar lo que sospecha es un ajuste de cuentas a manos de la Mafia Galeno. Al intentar interrogar a Hadley, la viuda, junto a su compañero Amos Turzo, son rápidamente echados de la casa por Margeaux, la temible suegra de Hadley. Sin embargo, la trama se vuelve más densa cuando Rick regresa poco después para examinar el apartamento de Pyne, donde descubre pruebas que vinculan al empresario con Endtook, la empresa vinculada a la Mafia Galeno. La investigación toma un giro inesperado cuando la policía irrumpe en la casa de Joe Galeno, el principal sospechoso, y encuentra el arma que mató a Pyne; Joe es arrestado y Rick acude a brindar la noticia a Hadley. La joven, destrozada por la situación, cae en los brazos de Rick, iniciando una apasionada relación que desafía los límites profesionales y morales.

Mientras tanto, Alonzo, primo de Joe Galeno, no cree en la culpabilidad de su familiar y toma cartas en el asunto, contratando a Rico Perrini, un antiguo compañero de Rick convertido en detective privado. Rico pronto descubre que el verdadero asesino puede ser un criminal de bajo nivel llamado Tony Fabian, quien, tras ser interrogado, confiesa haber recibido dinero de Hadley para llevar a cabo el asesinato. La noticia siembra la duda en torno a Rick, quien es trasladado de la unidad de homicidios. Aunque enfrenta un dilema personal y profesional, está convencido de la inocencia de Hadley y, además, no cree que Joe Galeno sea el verdadero culpable. Con el corazón dividido entre el deber y el amor, Rick se embarca en una carrera contrarreloj para desentrañar la verdad y salvar a la mujer que ama. La historia se torna un intrigante juego de traiciones y secretos, donde cada paso acercándose a la verdad puede tener consecuencias fatales. Esta profunda conexión emocional y la búsqueda de justicia juegan un papel fundamental en la narrativa, manteniendo al espectador al borde de su asiento.