Bowfinger, un

Cuando un desesperado productor de cine no logra conseguir una estrella de renombre para su película de bajo presupuesto, decide rodar el filme en secreto a su alrededor. Bobby Bowfinger, de 49 años, es el propietario y presidente de Bowfinger International Pictures, una empresa de producción con sede en Hollywood. Sin haber producido nunca una película, su fortuna personal es prácticamente nula y la empresa cuenta apenas con 2,184 dólares, una cantidad que Bobby ha invertido cada semana desde que decidió hacer una película en su infancia. Él cree que su suerte cambiará cuando su contador, Afrim, comience a escribir un guion de ciencia ficción sobre una invasión alienígena que Bobby está seguro que hará que todos los estudios lo deseen y que tiene Oscar escrito por todas partes.

Bobby cuenta con un grupo pequeño de seguidores que apoyan su visión y que eventualmente incluye a Daisy, una estereotípica chica de pueblo que busca hacerse grande en Hollywood y que se convierte en la protagonista femenina. Recien llegada a la ciudad, no tiene idea de cómo funciona el sistema en Hollywood, salvo en lo que involucra su atractivo físico. Bobby no tiene reparos en decir mentiras descaradas en su singular enfoque para lograr que la película se financie y se distribuya con solo esos 2,184 dólares como punto de partida. Utilizando varias de esas mentiras, logra un verbal de confirmación del gran ejecutivo de estudio Jerry Renfro, quien acepta distribuir la película, **siempre y cuando** esté protagonizada por Kit Ramsey, considerado el mayor estrella de acción del mundo.

Sin embargo, Bobby no logra convencer a Kit para que acepte el papel. Kit, un egocéntrico y paranoico actor, tiene como debilidad a las Laker Girls y vive bajo la dirección de Terry Stricter, el líder de una religión de nueva era llamada MindHead. Bobby idea un plan que cree que eludirá la negativa de Kit: filmar a Kit sin que él sepa que está siendo grabado. La única persona que conoce el plan es Dave, el hombre de confianza de Bobby convertido en director de fotografía, quien tiene acceso no oficial (es decir, técnicamente robado y gratuito) a los equipos de cámara del estudio y un conocimiento general sobre los movimientos diarios de Kit dentro del sistema.

Bobby logra convencer a otros actores de que el proceso actoral de Kit implica no interactuar con ellos fuera de las escenas específicas. Parte del esquema de Bobby incluye aprovechar la paranoia de Kit respecto a una posible invasión alienígena para capturar sus reacciones genuinas a lo que ocurre dentro del guion. Pero Bobby sabe que necesita que Kit grite las líneas finales “gotcha suckas” para que la película tenga éxito. Las complicaciones surgen cuando una de las actrices, Carol, desafía la política de Bobby de no tener contacto con Kit fuera de la filmación y cuando Bobby se ve obligado a contratar a un asistente de producción que también sea doble de acción y que tenga que hacer el papel de Kit en las escenas desnudas. A través de todo esto, Bobby tiene claro que habrá logrado su sueño en Hollywood si recibe una señal del cielo, simbolizada en un paquete de FedEx.