Fractura

Después de disparar a su esposa, Ted confiesa su crimen y solicita al tribunal que lleve su caso a juicio. Decide defenderse a sí mismo frente a Willy, un exitoso abogado. Sin embargo, hay más en este caso de lo que parece a simple vista.

Ted Crawford es un ingeniero estructural rico, brillante y meticuloso en Los Ángeles. Su vida da un giro trágico cuando decide disparar a su esposa, Jennifer, y atrapar a su amante, el teniente Robert «Rob» Nunally. Ted firma una confesión y, en la primera audiencia, reafirma su derecho a representarse y pide al tribunal que lo lleve inmediatamente a juicio. A pesar de que todos consideran que el caso es una formalidad, el fiscal Willy Beachum, un brillante abogado que a punto de unirse a un renombrado bufete de derecho civil, pronto descubre que la situación es más complicada de lo que aparenta. Aunque todos ven a Beachum como un ganador indiscutible, Ted detecta una pequeña falla en su carácter que decidirá el rumbo del juicio: la arrogancia de Willy.

Mientras Willy piensa que tiene el control del caso, Ted pone en marcha un plan meticulosamente diseñado, un complicado «reloj» criminal donde cada movimiento parece estar predeterminado. A medida que avanza el caso, se desnudan las verdades ocultas y las complejidades de los personajes se vuelven cada vez más evidentes. Ted utiliza su ingenio para manipular la situación a su favor, creando un juego psicológico que mantiene a Willy en la cuerda floja.

El enfrentamiento se convierte en un duelo de ingenios, donde cada uno intenta anticiparse al siguiente movimiento del otro. A medida que la tensión aumenta, se exploran temas de moralidad, justicia y la delgada línea entre el bien y el mal. Ted desafía la percepción de la verdad y la culpa, presentando un retrato inquietante de un hombre que, a pesar de haber cometido un crimen atroz, encuentra una forma de transformar su tribunal en un escenario donde él es tanto el juez como el protagonista.

Cada episodio se sumerge más en el retorcido mundo de las manipulaciones legales, las sorpresas en el estrado y el drama emocional entre los personajes. La dinámica entre Ted y Willy no solo es un choque de personalidades, sino también una exploración de la ambición, la venganza y las consecuencias de las decisiones, que podría cambiar sus vidas para siempre.