Garfield: La película

Jon Arbuckle decide sumar a su vida un segundo mascota, un perro llamado Odie. Sin embargo, Odie es secuestrado y depende de Garfield, el gato de Jon, encontrar y rescatar al canino.

Garfield es un gato gordo, perezoso, amante de lasaña y con un profundo odio hacia los lunes. Tiene todo lo que un gato podría desear: una casa acogedora, comida en abundancia y la atención de su humano, Jon Arbuckle. Su tranquila vida da un giro inesperado cuando Jon, en un intento por impresionar a la veterinaria Liz, quien fue su amor platónico en la secundaria, adopta a Odie. Desde ese momento, Garfield siente que su mundo se ve amenazado por la llegada de este nuevo compañero. Se da cuenta de que Odie no solo es un perro, sino que representa una competencia directa por el cariño de Jon.

A pesar de su pereza, Garfield intenta ignorar al perro, pero su existencia comienza a perturbarlo. Odie, en su torpeza y entusiasmo, logra hacer que Garfield se sienta cada vez más inadecuado. La convivencia entre estos dos animales es un torbellino de eventos cómicos, con Garfield tratando de sabotear las interacciones de Jon con Odie. Sin embargo, todo cambia una noche fatídica cuando Odie, decidido a explorar más allá de su hogar, se escapa y es secuestrado por un misterioso grupo de personajes. En un giro sorprendente para su carácter habitual, Garfield se ve obligado a dejar de lado su egoísmo.

Despertando un sentido de responsabilidad poco habitual en él, Garfield se embarca en una épica aventura para encontrar a Odie. Con la ayuda de un grupo variopinto de amigos animales, que incluyen a una perspicaz ardilla y un perro de la calle con un pasado complicado, Garfield debe superar sus propios límites. A lo largo de esta búsqueda llena de emociones, Garfield descubre no solo la importancia de la amistad y la lealtad, sino también un sentido de valentía que nunca creyó poseer.

A medida que avanza la trama, la conexión entre Garfield y Odie se vuelve más profunda y significativa. Garfield aprende a mirar más allá de su ego y sus inseguridades, dándose cuenta de que el amor y el cariño no son recursos limitados. Esta divertida y conmovedora historia resalta temas de amistad, rivalidad y crecimiento personal en un entorno digno de la comedia de situación, mientras Garfield lucha contra sus propios instintos de gato perezoso.