Asesinato en primer grado

Un joven abogado entusiasta e idealista se encuentra defendiendo a un prisionero de Alcatraz acusado de asesinar a un compañero de celda. Las circunstancias atenuantes: su cliente había pasado más de tres años en confinamiento solitario. Henri Young, un hombre desesperado, robó cinco dólares de una oficina de correos y terminó en la prisión más famosa, o infame, de todas: Alcatraz. Intentó escapar, fracasó, y fue condenado a tres años y dos meses en un aislamiento extremo, sumido en un calabozo oscuro, sin luz, sin calefacción y sin sanitario. La responsabilidad de su inhumano tratamiento recaía en Milton Glenn, el subdirector de la prisión, que actuaba con total impunidad debido a la negligencia de su superior. Glenn no sólo deshumanizó a Young, sino que le infligió una herida permanente al usar una navaja de afeitar, dejándolo cojo de por vida.

Tras esos tortuosos años, Young fue liberado del confinamiento solitario y asignado a la población general de la prisión. Sin embargo, casi de inmediato, la desesperación y el trauma acumulado brotan en él; toma una cuchara y asesina a un compañero prisionero de una puñalada en el cuello, un acto que le coloca nuevamente en el centro de la sala de justicia. Ahora, Young se enfrenta a un juicio por asesinato, y si es declarado culpable, su destino será la cámara de gas.

El caso recaerá en las manos de James Stamphill, un joven abogado con un fervor inquebrantable por la justicia. A pesar de las tremendas dificultades y la incredulidad de los miembros del jurado, Stamphill argumenta valientemente que Young no actuó solo, sugiriendo que la propia prisión, Alcatraz, tiene una mano en el crimen. La trama se desarrolla en un tenso enfrentamiento entre un joven idealista y un sistema penitenciario despiadado. A medida que el juicio avanza, se revelan las capas de deshumanización a las que fue sometido Young, y la defensa comienza a explorar los profundos temas del sufrimiento, la redención y la búsqueda de justicia en un sistema que parece haberla olvidado.

Cada testimonio, cada prueba, se convierte en un espejo que refleja las fallas de un sistema donde la venganza y el castigo prevalecen sobre la comprensión y la compasión. A lo largo de esta historia, las emociones fluctúan entre la desesperación y la esperanza, mientras James Stamphill lucha contra un destino que parece ya estar sellado para su cliente. ¿Lograrán sus convicciones y su tenacidad desafiar a un sistema que se niega a cambiar?