Mi vida de calabacín

Después de perder a su madre, un joven llamado Courgette se encuentra en un orfanato donde vive con otros niños huérfanos de su edad. Este complejo viaje hacia la aceptación y el descubrimiento personal comienza en un entorno que parece extraño y a veces hostil. El apodo «Courgette» puede parecer peculiar para un niño de solo 9 años, pero su historia es sorprendentemente universal y resonará en muchos.

La vida de Courgette da un giro inesperado tras la desaparición de su madre. Su llegada al orfanato no es fácil; cada rincón le recuerda su vida anterior y lo que ha perdido. Acompañado por un amable oficial de policía llamado Raymond, quien se convierte en un pilar de apoyo, Courgette comienza a explorar su nuevo hogar. Simon, una de las primeras caras amigables que encuentra, se convierte rápidamente en su amigo más cercano. Juntos, enfrentan los desafíos de adaptarse a la vida en el orfanato, donde cada día presenta nuevas pruebas y oportunidades para crecer.

Courgette se ve rodeado de otros niños con sus propias historias de desamor y abandono. La relación con los compañeros de su nueva vida no es siempre fácil; hay celos, luchas de poder y la constante búsqueda de un sentido de pertenencia. Sin embargo, la bondad que se desarrolla entre ellos poco a poco les enseña sobre la importancia de la amistad y la lealtad. A medida que Courgette va conectando con sus nuevos amigos, empieza a entender el valor de la confianza; aprende, por primera vez, que no todos los adultos son una fuente de dolor y desilusión.

Raymond, con su corazón compasivo y su inquebrantable paciencia, juega un papel fundamental en el desarrollo de Courgette. Le guía a través de los momentos difíciles y le ayuda a encontrar la esperanza en medio de la tristeza. Su apoyo incondicional le muestra que el amor puede tomar muchas formas y que, incluso en los momentos oscuros, hay espacio para la calidez y la conexión humana.

A medida que Courgette navega por su nueva vida, comienza a vislumbrar la posibilidad del amor verdadero, no solo en el sentido romántico, sino en el profundo sentido de las relaciones que forja con sus compañeros. Con sensibilidad y humor, este conmovedor relato invita a los espectadores a reflexionar sobre la familia, la amistad y la resiliencia, dejando un mensaje resplandeciente sobre la esperanza y el poder curativo del amor.