Mi suicidio

En esta dramedy de crecimiento personal, seguimos la vida de Andrés, un adolescente de 17 años que se siente como un paria en su instituto. Apasionado por el cine y la tecnología, Andrés pasa la mayor parte de su tiempo detrás de la cámara, inmerso en el mundo de los medios de comunicación, donde su imaginación puede volar libremente. Sin embargo, la realidad que enfrenta en la vida cotidiana es muy distinta. Bullying, incomprensión y la presión por encajar lo han llevado a un abismo emocional y lo han hecho cuestionarse su lugar en el mundo.

Todo cambia cuando decide llevar a cabo un inquietante proyecto para su clase de medios: una transmisión en vivo en la que anunciará su suicidio. Su intención, aunque impactante, es generar una reflexión sobre los problemas de salud mental entre los jóvenes y provocar una conversación sincera en torno a la soledad y el desprecio que sienten muchos adolescentes. Sin embargo, la respuesta a su anuncio no es la que esperaba. En lugar de una fría indiferencia, su proyecto desata una oleada de atención, tanto de sus compañeros de clase como de las redes sociales.

A medida que se desarrolla la trama, se exploran las complejidades de las relaciones humanas. Andrés se encuentra rodeado por un grupo diverso de personajes que le ofrecen diferentes perspectivas sobre la vida y sus luchas. Entre ellos está Eva, una compañera de clase con su propia lucha interna. A través de su amistad, ella le muestra que la esperanza puede resplandecer incluso en los momentos más oscuros. También está Mario, un niño popular que resulta ser más auténtico y comprensivo de lo que inicialmente parece.

La narrativa destaca la importancia de abrirse y buscar ayuda, así como el poder de la empatía y la conexión humana. A medida que Andrés navega por su turbulento viaje, aprende valiosas lecciones sobre la amistad, el amor y la aceptación de uno mismo. Su proyecto, inicialmente concebido como un grito de desesperación, se transforma en un vehículo de cambio, inspirando a otros a hablar sobre su dolor y compartir sus historias.

Este viaje emotivo y conmovedor unifica el humor y la tristeza, convirtiendo a este filme en una experiencia única que invita a la reflexión y a la discusión sobre los problemas delicados que enfrentan los jóvenes hoy en día.