Los chicos del coro

Pierre, un exitoso director de orquesta, regresa a su hogar tras la muerte de su madre. En su camino, se encuentra con un viejo diario que lo induce a recordar sus años escolares y a su maestro de música, Clément Mathieu.

Fond de l’Étang es un internado para chicos problemáticos situado en el campo francés. En medio del siglo XX, la escuela está bajo el mando del director M. Rachin, un disciplinario egocéntrico cuyo mantra no oficial es «acción – reacción», lo que implica que cualquier desobediencia tendrá graves consecuencias. Este enfoque no está funcionando, ya que los chicos son un grupo indisciplinado que desafía constantemente las normas. Por su parte, los maestros, más interesados en evitar la próxima travesura que en enseñar, se dedican a vigilar a los alumnos.

El 15 de enero de 1949 marca la llegada de un nuevo supervisor, M. Clément Mathieu, un hombre de mediana edad que busca encontrar su lugar en la vida tras varios fracasos. A pesar de que los estudiantes son indisciplinados, Mathieu no cree en la política de «acción – reacción» y, por lo tanto, entra en conflicto con Rachin mientras se propone socavar discretamente dicho sistema. Poco a poco, su enfoque, que consiste en adaptar la disciplina a la falta, comienza a tener un efecto positivo en algunos alumnos.

Con la aprobación renuente de Rachin, Mathieu inicia un experimento más ambicioso: transformar el ambiente dentro de la escuela, siendo el núcleo de este experimento la creación de un coro con sus estudiantes. Este paso es difícil tanto para él, un músico fracasado, como para los alumnos, quienes al principio son reacios a participar. Durante este proceso, Mathieu se centra en dos estudiantes por motivos distintos. Pépino, un chico más joven, parece carecer de orientación y siempre menciona que está esperando a su padre, quien nunca llega por él. Por otro lado, Pierre Morhange, un estudiante mayor, es el paradigma de la contradicción: introvertido pero propenso a explosiones de rebeldía, descrito por otros maestros como un «demonio con cara de ángel». A medida que Mathieu descubre las razones detrás de su rebeldía, se da cuenta de que Morhange esconde un amor genuino por la música y un verdadero talento.

Además de enfrentar la resistencia de Rachin y el escepticismo de los estudiantes, Mathieu debe lidiar con Pascal Mondain, un chico problemático que llega al internado con tendencias patológicas y cuya presencia podría causar estragos en toda la escuela, no solo en el proyecto musical de Mathieu. Más de cincuenta años después, Morhange y Pépino, quienes no se han visto desde entonces y apenas compartieron momentos en la escuela, comienzan a leer las memorias de Mathieu, las cuales revelan la razón por la cual ambos tienen acceso a estas y el impacto que el maestro tuvo en sus vidas.