La Plaga

Una madre soltera se enfrenta a los desafíos de criar a su hijo mientras intenta cultivar langostas como una fuente de alimento de alto contenido proteico. Con las crecientes preocupaciones sobre la seguridad alimentaria y la sostenibilidad, ella ha encontrado en este insecto una solución innovadora que podría transformar la forma en que se alimenta a la humanidad. Sin embargo, su viaje no es fácil. A pesar de su dedicación y esfuerzo, se encuentra con un obstáculo imprevisto: las langostas no parecen querer reproducirse. Frustrada pero decidida, la madre comienza a investigar más sobre el comportamiento de estos insectos y la manera en que pueden ser estimulados para reproducirse.

A medida que profundiza en su investigación, descubre un aspecto inquietante de las langostas: tienen una inclinación sorprendente por la sangre. Este descubrimiento no solo plantea cuestiones éticas sobre la crianza de estas criaturas, sino que también motiva a la madre a reevaluar sus métodos y su relación con la naturaleza. Mientras lucha por encontrar un equilibrio entre la necesidad de alimentar a su familia y las implicaciones de su emprendimiento, la madre se enfrenta a dilemas morales que la llevan a cuestionar su propia humanidad.

A lo largo de la trama, el espectador es testigo de la evolución de su personaje. Al principio, es una madre desesperada, dispuesta a hacer cualquier cosa para sobrevivir y ofrecer un futuro mejor a su hijo. Sin embargo, a medida que se sumerge en el mundo de la biotecnología y la Agricultura sostenible, empieza a encontrar un sentido de propósito. La relación con su hijo también se explora de manera profunda; él, que al principio ve a las langostas como simples insectos, empieza a comprender las implicaciones de lo que su madre intenta lograr, lo que genera un poderoso vínculo entre ellos.

El film plantea preguntas sobre la ética de la manipulación genética, las decisiones difíciles que se deben tomar en nombre de la supervivencia y el impacto de nuestras acciones en el mundo natural. En un contexto donde la comida se ha vuelto un recurso escaso, la madre se convierte en un símbolo de la lucha por la innovación frente a la adversidad. La combinación de ciencia, emoción y dilemas morales crea una narrativa cautivadora que deja a la audiencia reflexionando sobre el futuro de la alimentación y las elecciones que enfrentamos en la búsqueda de sustento y supervivencia.