Cuando los dinosaurios dominaron la Tierra

Sanna escapa de ser sacrificada y se encuentra con Tara. Juntas, viven en una tribu costera que venera al Dios Sol y luchan por sobrevivir ante los peligros que representan las criaturas de la Era Mesozoica. Ambientada en un pasado antiguo donde humanos y dinosaurios coexistían, esta historia sigue a una pequeña tribu que, en su desesperación por obtener protección contra las enormes bestias que acechan su existencia, ofrece a mujeres rubias como sacrificios a su Dios Sol.

Sanna, una joven de espíritu libre y coraje indomable, es elegida como una de las ofrendas. Sin embargo, su destino cambia drásticamente cuando una feroz tormenta interrumpe la ceremonia. Con el corazón palpitante y la adrenalina fluyendo, logra escapar de la trampa mortal que le habían tendido. Su primera búsqueda es refugiarse de la feroz naturaleza que la rodea y de los temibles rivales que acechan en la penumbra. La selva es tanto un hogar como un enemigo, llena de maravillas y peligros a partes iguales.

Durante su odisea, Sanna se encuentra con Tara, otra sobreviviente que ha encontrado la forma de prosperar en esta tierra inhóspita. Tara es astuta, ingeniosa y tiene un profundo conocimiento sobre las criaturas que habitan en su mundo, lo que rápidamente convierte a ambas en aliadas. Juntas, descubren no solo el poder de la amistad y la solidaridad, sino también la fuerza que brota de la unidad frente a la adversidad.

Mientras luchan por sobrevivir, Sanna y Tara deben enfrentarse no solo a gigantes dinosaurios que amenazan con devorarlas, sino también a la rivalidad de otras tribus que buscan mantener su dominio. La historia se adentra en temas como la libertad, la resistencia y la lucha por la identidad en un mundo donde la vulnerabilidad puede convertirse en una espada de doble filo. Con cada desafío, Sanna crece como guerrera y líder, impelida por su deseo de romper los ciclos de miedo y sacrificio que han marcado la vida de su tribu.

La narrativa se despliega en una vasta y visualmente impresionante escenografía llena de paisajes sobrecogedores, donde la luz del sol resplandece en medio de la oscuridad inminente de la amenaza que les rodea. La conexión con el Dios Sol adopta un nuevo significado, ya que la esperanza y la valentía florecen entre las sombras de la desesperación. El viaje de Sanna y Tara no solo se convierte en una lucha por la supervivencia, sino también en un camino hacia la autodeterminación y el empoderamiento, en una era donde cada decisión puede cambiar el curso de su destino.